miércoles, 31 de agosto de 2011

Fin del primer verano

Y si hace dos meses no quería empezar y la noche de antes no pude dormir....ahora me gustaría prorrogar este verano interminable, sin fines de semana y con muchos sueros que manejar hasta que me dejaran.
Satisfecha con el trabajo hecho, con lo aprendido y con lo vivido. Sin cosas en el tintero durante este tiempo.
Porque esto era un reto para mi y lo he superado con creces, contenta por como he hecho las cosas.
Habré tenido muchos fallos durante estos dos meses, algunas pastillas sin dar, pero nunca se me ha quedado una palabra sin decir. Soy así, dentro y fuera.
Feliz porque los pacientes me llamaran por mi nombre, porque prefieran que sea yo la que les haga las cosas y no otra de las muchas enfermeras que hay en la planta.
Contenta y con ganas de seguir aprendiendo y creciendo.

"No olvidéis nunca que habéis elegido una profesión de ayuda y que el centro de vuestro quehacer profesional son ellos, los pacientes y sus familias.
No habéis elegido un trabajo cualquiera, habéis decidido acompañar a las personas en su camino de salud y váis a vivir con ellas momentos muy especiales, ese es vuestro privilegio. Vuestro compromiso es mantener o mejorar su calidad de vida desde el respeto más profundo por lo que son.
Si lleváis a cabo vuestra profesión de manera eficaz recibiréis mucho a cambio porque, como dicen las autoras de El pensamiento enfermero, "el cuidado bien hecho nutre tanto a quien lo da como a quien lo recibe". "


No hay comentarios:

Publicar un comentario